Gastrónomos y restauradores siguen a pies juntillas las calificaciones que otorga un manual concebido en su momento para orientar fundamentalmente a viajeros. El fabricante de neumáticos francés André Michelin la creó en 1900 tal vez ignorando que figurar en ella (sobre todo tener alguna estrella) supondría que hoteleros y hosteleros tocarían el cielo con las manos por ser reconocidos en sus páginas. Salir de ellas era, y sigue siendo, una especie de condena al ostracismo que todos quieren evitar. Hoy sus dictados se siguen en casi treinta países, también por muchas personas en esta provincia.
Los primeros establecimientos recomendados en Ourense aparecen en 1911, once años después de la edición del primer número. Fueron el célebre y desaparecido Hotel Roma de la capital y el Hotel Salgado de Verín. Por su parte, el primer restaurante fue el Orensano, de Puebla de Trives, en el año 1936. Estos son algunos de los muchos datos que contiene un ingente trabajo de coleccionismo que durante años ha recopilado el gallego Antonio Cancela, que tiene en su poder 728 guías diferentes, lo que supone poseer la mayor colección del mundo. Únicamente le queda una por conseguir aunque, como aclara, “estoy en trámites de hacerlo”. Una Guía Michelin es una pequeña joya en sí misma, como lo demuestra el que hace unos días se haya subastado un histórico ejemplar por 18.960 euros, aunque, como aclara Antonio Cancela, posiblemente su valor real no debiera superar los 11.000.
A este coleccionista se debe la divulgación de algunas interesantes curiosidades sobre la relación de la Guía Michelin con muchos países y, en este caso, con la provincia de Ourense. Por ejemplo: los establecimientos que más años han sido recomendados fueron el restaurante San Miguel de la capital (hoy cerrado) y el Parador de Monterrey con 56 y 47 años, respectivamente. Los restaurantes que consiguieron una estrella fueron también el San Miguel, de 1986 a 1989, y A Rexidora (Bentraces), entre 2005 y 2011. Cancela hace notar también que “en 103 años de Guía Michelin solo se recomendaron 93 establecimientos en 25 ayuntamientos de los 92 que tiene la provincia y esto nos da una pista de lo difícil que es estar recomendado en la biblia de las guías de viaje”.
Antonio Cancela. Su deseo: enseñar su colección a los interesados
Antonio Cancela colecciona sin desmayo ejemplares de la Guía Michelin desde 1980, fecha en la que adquirió la primera. Iba de viaje con su familia por España “y me gustó la selección de establecimientos que contenía”. Ya no se detendría. Cuando salía a cualquier país compraba la publicación, “visitaba librerías de ocasión y exposiciones de vehículos antiguos” y aprovechaba cualquier oportunidad para incrementar su colección. Sin embargo, el salto exponencial lo dio hace siete años cuando salió a Internet (su dominio es www.cancela.org) y la difusión de su trabajo se ha multiplicado. Su deseo es encontrar una sala en la que exponer las 728 guías de su colección “para que todos puedan disfrutar de ellas”.
Fuente: La Region
No hay comentarios:
Publicar un comentario