El frío no amilanó la fiesta. El entroido en la capital ourensana arrancó como debía de arrancar, con una gran fiesta en la calle. O Paseo de la capital acogió la antesala y uno a uno los verdaderos protagonistas de la jornada fueron llegando a la plaza Maior. Allí pandillas de mexicanos, acróbatas y payasos les esperaban. A Pita de Eiroás, Frei Cando y Paquita y Nicanor no faltaron a una fiesta amenizada por la música del folión de Trives. Los representantes de los entroido capitalinos fueron hablando.
Inició el abad mayor de la cofradía de Frei Canedo de A Ponte. «O venres pasado pasamos a ponte para reivindicar o carnaval de barrio», dijo. Seguidamente invitó a todos los presentes a visitarlo el lunes, día grande. Cuatro jóvenes fueron las encargadas en nombre de Seixalbo de animar la visita al entroido de Paquita y Nicanor y otra mujer, A Pita de Seixalbo, hizo lo propio con la Voda da Pita que se celebrará el próximo martes de carnaval. La teniente de alcalde, Isabel Pérez, habló en noviembre de la corporación municipal. «O entroido é a festa de Ourense. Vivídeo na rúa, desfrutade da cidade. Seguro que ao rematar á festa seremos oito mais felices». Los fuegos de artificio sobre la plaza dieron el inicio a la gran fiesta.
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