La Consellería de Medio Rural ha dividido la provincia en tres grandes bloques desde los que se promoverán y ejecutarán políticas para fijar población y servicios en el rural. Esos son los ejes fundamentales de la ley de desarrollo sostenible en el medio rural, promovida por el Gobierno Central; y en la que la Xunta es cofinanciadora de los fondos al 50% (sobre un total de 170 millones de euros a ejecutar hasta 2014).
Para ejecutar los protocolos de actuación del Programa de Desenvolvemento Rural Sostible, la Xunta promueve la constitución de tres consellos de zona. El más importante por extensión y también por prioridad (según el mapa dibujado por la Xunta) es el denominado Depresións ourensanas e Terra do Sil, que abarca las comarcas de Viana, Verín, Terra de Trives, Terra de Caldelas, A Limia y A Baixa Limia. En este caso la prioridad de las actuaciones es de nivel uno. En nivel dos (hay un total de tres categorías) estarían los otros dos bloques territoriales: Valdeorras y Miño Central (que abarca el occidente provincial). Así quedaría cubierta toda la provincia salvo la capital. La Xunta considera que Ourense es un Concello totalmente urbano.
Reparto de fondos
Los consellos son «un órgano de aplicación da lei e tamén dos fondos que se prevén en materia de desenvolvemento, non só no ámbito agrario, senón en todos os que teñan que ver co ámbito rural», apuntaba ayer el conselleiro de Medio Rural, Samuel Júarez, al inicio de la asamblea de creación del consello de zona de Valdeorras.
En cada consello están representados «a Xunta, tres alcaldes a proposta da Fegamp, sindicatos agrarios e de clase, representantes do grupo de desenvolvemento rural, asociacións de mulleres rurais e colectivos conservacionistas» relacionados con el medio ambiente.
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