El consejo de administración de Meisa, empresa que gestiona el complejo turístico de la estación de montaña de Cabeza de Manzaneda, se reunió ayer para conocer los resultados económicos del 2008.
En el informe presentado por el presidente ejecutivo, Luis M. Gurriarán, destaca que las deudas pendientes que se encontró al inicio de su andadura profesional en la sociedad, en diciembre de 2007, por un importe de 643.843 euros, «están resueltas o en gestión de resolución», explicó.
La media de resultados de los cuatro ejercicios anteriores arroja un saldo negativo de 789.266 euros, reduciéndose este déficit en el 2008 en un 56,45% para quedarse en 343.762 euros. Según Gurriarán, lo que necesitaba Meisa era «un impulso importante, una puesta en el mercado y una toma de conciencia de la plantilla a todos los niveles hacia un concepto empresarial moderno».
En este último año, en la estación se mejoraron las instalaciones y se crearon otras nuevas (como una pista y un bar), se renovó el material de alquiler y se hizo un control de gasto en consumo y suministros. Además, la contratación de personal se hizo «en función de las necesidades» y se buscaron nuevos canales «en la política comercial», explicó Gurriarán ante el consejo. Una serie de mejoras que se reflejaron en los resultados económicos, mejorando los ingresos de explotación en un 71,43%, lo que significó reducir el déficit de explotación en un 72,44%. Así, la deuda del último año fue de 238.568 euros, frente a los 865.785 del ejercicio anterior.
Proyectos de futuro
En el consejo de administración celebrado ayer también se habló de los proyectos de futuro que desde la gerencia de Gurriarán se han propuesto, quedando sobre la mesa a la espera de las decisiones que adopte la nueva Xunta. Y es que desde Medio Ambiente tienen mucho que decir sobre cualquiera de las actuaciones a llevar a cabo en la estación, ya que la estación es zona protegida.
Fuente: La Voz de Galicia
En el informe presentado por el presidente ejecutivo, Luis M. Gurriarán, destaca que las deudas pendientes que se encontró al inicio de su andadura profesional en la sociedad, en diciembre de 2007, por un importe de 643.843 euros, «están resueltas o en gestión de resolución», explicó.
La media de resultados de los cuatro ejercicios anteriores arroja un saldo negativo de 789.266 euros, reduciéndose este déficit en el 2008 en un 56,45% para quedarse en 343.762 euros. Según Gurriarán, lo que necesitaba Meisa era «un impulso importante, una puesta en el mercado y una toma de conciencia de la plantilla a todos los niveles hacia un concepto empresarial moderno».
En este último año, en la estación se mejoraron las instalaciones y se crearon otras nuevas (como una pista y un bar), se renovó el material de alquiler y se hizo un control de gasto en consumo y suministros. Además, la contratación de personal se hizo «en función de las necesidades» y se buscaron nuevos canales «en la política comercial», explicó Gurriarán ante el consejo. Una serie de mejoras que se reflejaron en los resultados económicos, mejorando los ingresos de explotación en un 71,43%, lo que significó reducir el déficit de explotación en un 72,44%. Así, la deuda del último año fue de 238.568 euros, frente a los 865.785 del ejercicio anterior.
Proyectos de futuro
En el consejo de administración celebrado ayer también se habló de los proyectos de futuro que desde la gerencia de Gurriarán se han propuesto, quedando sobre la mesa a la espera de las decisiones que adopte la nueva Xunta. Y es que desde Medio Ambiente tienen mucho que decir sobre cualquiera de las actuaciones a llevar a cabo en la estación, ya que la estación es zona protegida.
Fuente: La Voz de Galicia
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