La nueva gerencia de la estación de montaña de Manzaneda
comunicó a la representación de los trabajadores su intención de
presentar un ERE (expediente de regulación de empleo) para los 40
trabajadores que integran la plantilla. Los empleados serán despedidos
durante el período de obras que remodelará las instalaciones
La empresa decidió abrir inmediatamente el período legal de consultas
y, ante esta situación, CCOO mantuvo una asamblea de trabajadores en la
propia rstación de montaña para trasladar a la plantilla la información
sobre las consecuencias directas de esta medida excepcional qué toma
"unilateralmente" la nueva gerencia.
Los nuevos responsables de las instalaciones (Grupo Mas Costas)
justifican el ERE a causa del "inminente comienzo de las obras de
remodelación integral del complejo que implica la necesidad de cerrarlo
al público mientras duren las mismas". Según la empresa, en principio y
sin rematar los plazos de negociación, la duración del ERE sería de 9
meses. Se trataría de un ERE de suspensión, es decir: la intención
inicial es la de contar con toda la plantilla tras el remate de las
obras, dejando abierta incluso la posibilidad de hacer "aperturas
parciales" de las instalaciones sí se dieran las condiciones
climatológicas favorables aunque no estuviesen rematadas las obras
previstas.
Los sindicatos critican "la nueva reforma laboral que convirtió a los
trabajadores en meros espectadores sin capacidad real de negociación ya
que los acuerdos en período de consultas entre sus representantes
legales y las empresas dejan de ser vinculantes hasta su posterior
autorización por parte de la Autoridad Laboral". El plan de renovación y
viabilidad de Manzaneda fue esbozado en líneas maestras por los
responsables del grupo. A falta de más detalles, los sindicatos lo
califican "a priori como un proyecto ilusionante y ambicioso".
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