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domingo, 15 de mayo de 2011

La falta de vocales boicoteó el pleno de la Mancomunidad

La falta de quórum impidió el desarrollo del último pleno de la Mancomunidade das Terras de Navea-Bibei, en la que participan los concellos de Trives, San Xoán de Río y Manzaneda. A la convocatoria del presidente, el socialista de Manzaneda Herminio Cereijo Diéguez, sólo acudió el nacionalista de este mismo Concello, David Rodríguez Estévez. Para que la sesión plenaria pueda comenzar es obligada la presencia de, al menos, tres vocales.

Los seis vocales restantes, que no acudieron, son los siguientes: un concejal del PP en Manzaneda; dos tránsfugas del PP y uno del PSOE por Trives; y los dos del PSOE y del BNG de Río.

La suspensión del pleno es una consecuencia del proceso de disolución en el que está sumida la Mancomunidade creada en 1991. Todo comenzó en 2010, cuando el pleno inició la reducción de los servicios que ofrecía. En la actualidad, Manzaneda sólo comparte Protección Civil, en tanto que San Xoán de Río y Trives llevan conjuntamente la residencia de la tercera edad, el matadero y los servicios técnicos de Urbanismo.

El presidente, Herminio Cereijo, no se opone a disolver el organismo comarcal, aunque afirma que antes 'hai que pagarlles a tódolos acreedores. Págaselle e a disolvo eu', dijo. Acto seguido, puso sobre la mesa un extracto de los acreedores de la Mancomunidade. El montante total es de 130.579 euros e incluye facturas desde 2009, aunque la mayor partida corresponde a la deuda contraída con Sogama por gestionar la basura: 116.022 euros.

El problema tiene fácil solución, que los concellos abonen las cuotas atrasadas que, según los datos que maneja el presidente, son las siguientes: 276.000, 138.000 y 27.000 euros, en Trives, San Xoán de Río y Manzaneda, respectivamente. Herminio Cereijo apuntó que, desde su llegada a la presidencia, en julio de 2009, el total de la deuda se rebajó en casi 100.000 euros. 'A Mancomunidade vai gastando unha cantidade similar á que ingresa. A residencia de anciáns da beneficios', aseguró.

Los datos anteriores son engañosos, pues existe una deuda de 148.000 euros, adquirida con el Concello de Chandrexa. Se remonta a 2002, cuando abandonó el organismo, pero Herminio Cereijo dice no querer saber nada de ella.

Fuente: La Region

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