El Estado pagará a los partidos políticos una
subvención de 276,86 euros por cada concejal electo y de 0,55 euros por
cada voto obtenido en las elecciones locales del año 2011. Para acceder
esa ayuda se establecía la obligatoriedad de que los partidos rindieran
cuentas de sus gastos electorales, que no debían superar un límite
máximo. Ese tope se establece multiplicando por 0,11 euros el número de
habitantes del municipio correspondiente. Casi medio centenar de
organizaciones políticas gallegas podrían perder esa ayuda por ocultar
sus gastos o por superar el tope que les correspondía.
Según el informe elaborado por el Tribunal de
Cuentas sobre las elecciones de mayo del 2011, se presentaron 1.680
formaciones políticas y 881 no rindieron sus cuentas en tiempo y forma.
De ellas, 45 son gallegas. El dictamen del organismo fiscalizador
concluye con la propuesta de no adjudicarles la subvención que les
correspondería. El guante ha sido recogido por la Junta Electoral
Central, que además ha informado del inicio de actuaciones previas con
el objetivo de decidir si abre un expediente sancionador a esos
partidos. Finalmente, el organismo ha pedido a la Dirección General de
Política Interior que certifique si alguna de esas formaciones recibió
los adelantos de subvención que están autorizadas a solicitar con
anterioridad a las elecciones. En el caso de que así fuera, se les
exigirá su devolución.
Los infractores se reparten por todo el
territorio gallego, aunque es en la provincia de A Coruña donde más
partidos (23) han ocultado sus gastos electorales al Tribunal de
Cuentas. Le siguen las de Pontevedra (11), Ourense (7) y Lugo (4). En
todos los casos se trata de agrupaciones electorales o formaciones
políticas independientes. La mayor parte tiene escasa representación,
pero hay excepciones. Algunas de las organizaciones infractoras
sostienen los gobiernos y las alcaldías de sus respectivos municipios,
como ocurre en Rábade, A Pobra de Trives, Ordes, Monfero o Negreira,
entre otros.
Por su nivel de gasto, entre quienes sí cumplen
-obviando a los grandes partidos, que declaran sus cuentas a nivel
nacional- destacan Terra Galega, que dedicó 28.541,80 euros a su campaña
en Narón, y Converxencia XXI, que destinó 10.544,68 euros a la suya en
Tui. El resto, como Alternativa dos Veciños en Oleiros, están por debajo
de los 10.000 euros. La formación oleirense gastó 2.699 euros. Dos
casos destacan sobre el resto porque, además de rendir sus cuentas en
plazo, declararon cero euros de gastos. Se trata de Democracia
Ourensana, en la capital de esa provincia, y de independientes de
Viveiro.
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