El único complejo de alta montaña gallego no solo
recibe la ayuda directa de la Xunta para superar su deficitaria
situación económica, sino que también logra cuantiosos apoyos
indirectos. De hecho, Manzaneda Estación Invernal S.A., según datos
publicados ayer en el Diario Oficial de Galicia (DOG), se hizo con casi
un tercio de las subvenciones concedidas por la Administración
autonómica, con cargo al 2012, «para a potenciación do turismo mediante a mellora de establecementos restaurantes».
Cofinanciado al 80 % con dinero europeo del
programa Feder y repartido por la Secretaría Xeral para o Turismo en
régimen de concurrencia competitiva, del referido paquete de fondos se
beneficiaron 20 empresas. En total, estas últimas se repartieron 489.440
euros, o sea, un promedio de 24.472 por sociedad. No obstante, hubo una
que no percibió más que 958 y, en el polo opuesto, otra, la de Meisa,
que recibió 145.274. Es decir, se quedó con un 29,7 % del global de
recursos asignados.
La distribución de estos subsidios arrancó a
mediados de junio del año pasado, si bien no quedó resuelta hasta el 31
de enero del presente. Finalmente, ayer se conoció la resolución del
expediente a través del DOG, que difundió en paralelo el reparto de
otros dos bloques de ayudas turísticas lanzados el verano pasado: uno
menor (29.896 euros), para obras en albergues, que se anotaron cuatro
firmas, y otro de mucho mayor calado.
Este último había sido convocado tanto para
favorecer reformas en cierto tipo de hoteles como para crear o remodelar
la oferta complementaria de otros a lo largo del bienio 2012-2013.
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