La riqueza natural de la provincia puso los medios para crear tres parques naturales: O Invernadeiro, Enciña da Lastra y Baixa Limia-Serra do Xurés. Pero las posibilidades son mucho mayores y no se agotan en estas áreas, a las que pronto se le sumarán otras dos: Pena Trevinca y Macizo Central. Son zonas montañosas que poseen la cumbre más alta de la Comunidad autónoma: Pena Trevinca, con 2.127 metros de altitud. A su vez, Manzaneda posee 1.787 metros.
Las dos ya gozan de medidas de protección, pues fueron declarados Lugares de Interés Comunitario (LIC) en 2004. Además, pertenecen a las zonas de especial protección de los valores naturales (ZEPVN) y, en el caso de Pena Trevinca, también a las zonas de especial protección de aves (ZEPA). Los futuros parques naturales, que promueve la Consellería de Medio Ambiente e Desenvolvemento Sostible, guardan relación con sus LICs, aunque su extensión no coincide exactamente con la de ellos.
El parque natural del Macizo Central está ubicado sobre la Serra de Queixa y abarca territorios de ocho municipios: Manzaneda, Trives, Chandrexa de Queixa, Montederramo, Vilar de Barrio, Laza, Castrelo do Val y Vilariño de Conso.
Este lugar está formado por sierras y montañas casi despobladas, con extensos pastizales y terrenos sobre los que predomina una gramínea: la festuca. En estos parajes también pueden encontrarse zonas de fraga autóctona.
Principalmente, son bosques de robles “carballeiras”, que se asientan en las zonas próximas a los regatos. Son tierras del lobo, una especie que creó poblaciones estables.
La fauna es rica e incluye especies que raramente pueden verse en otros parajes. En este grupo entran el gato montés, la alondra común, el águila real, el búho real o la lagartija de la sierra.
El segundo parque natural es el de Pena Trevinca. Abarca los municipios de Carballeda, A Veiga y Viana y ofrece “un estado de conservación bo, en xeral, aínda que sofre frecuentemente a acción dos lumes e os impactos derivados da minaría (extracción de lousa”, según se apunta desde Medio Ambiente.
Trevinca posee uno de los lugares de mayor valor natural de la Comunidad autónoma: “O Teixadal”, incluido entre los bosques de tejos “de maior importancia da península Ibérica”, según Medio Ambiente. Además, hay castaños, robles y “carballeiras” del endémico “Quercus orocantabrica”.
La variada fauna incluye especies endémicas, como son la lagarta rabuda o el “lagarto das silveiras”. Las aves merecen un capítulo especial, con poblaciones únicas como las del acentón alpino, curruca tomillera y abejaruco común. También hay rapaces, como el águila culebrera o el halcón abejero.
Medio Ambiente pretende consensuar los espacios protegidos
La Consellería de Medio Ambiente pretende obtener el visto bueno de los ciudadanos para los dos nuevos parques naturales. Con este objetivo presentará en público sus planes de ordenación de recursos naturales y de desarrollo sostenible.
La declaración de parques naturales pretende ofrecer una fórmula “de desenvolvemento, baseada na natureza e na potencialidade turística”, según explicó el director xeral de Conservación da Natureza, Xosé Benito Reza. Añadió que su creación convertirá en un importante “activo istos territorios mergullados da Galicia interior”.
Asegura que su ejecución “dependerá da armonía e do consenso. Sen acordo é moi difícil crear os parques e nós non queremos impoñer”. A este respecto, el director xeral pretende presentarlos en reuniones “con participación pública”.
Insiste en que las medidas de protección no son nuevas en el Macizo Central y Pena Trevinca, declarados lugares de interés comunitario, dentro de la Red Natura 2000, en el año 2004. La Consellería de Medio Ambiente trabaja sobre la base de estas áreas protegidas, aunque la superficie de los futuros parques naturales será inferior y oscilará entre las 20.000 y las 25.000 hectáreas. En todo caso, tanto el del Macizo Central como el de Pena Trevinca forman parte del programa “Ourense, Montaña Oriental” (Omor), que incluirá también los de O Invernadeiro y Enciña da Lastra.
Como primer paso para crear los nuevos espacios protegidos, la Consellería redactó sus respectivos planes de ordenación de los recursos naturales. Estos trabajos realizan un diagnóstico de los lugares y definen sus grados de protección.
Un año de trámites para su creación
Los dos planes de ordenación de los recursos naturales y los de desarrollo sostenible de los futuros parques naturales están finalizados. Lo anunció el director xeral de Conservación da Natureza, que los calificó de “ferramentas básicas para poñelos en marcha”.
Antes de continuar los trámites de creación de los espacios protegidos, los cuatro planes serán presentados a los vecinos de los 11 concellos afectados, buscando conseguir su visto bueno. Para crear los nuevos parques naturales, después de presentar los citados planes a los vecinos, éstos deberán someterse a exposición pública durante un mes. Este periodo permitirá presentar alegaciones a las personas o entidades que lo estimen conveniente. La respuesta a estas alegaciones, que dará la Consellería de Medio Ambiente, es el último paso que deberán superar los dos proyectos de protección natural antes de su aprobación definitiva, que otorgará el Consello de la Xunta.
Xosé Benito Reza apuntó que todos estos pasos podrían realizarse en un plazo aproximado de un año, siempre que exista un consenso acerca de la creación de los nuevos espacios protegidos.
Fuente: La Region
Las dos ya gozan de medidas de protección, pues fueron declarados Lugares de Interés Comunitario (LIC) en 2004. Además, pertenecen a las zonas de especial protección de los valores naturales (ZEPVN) y, en el caso de Pena Trevinca, también a las zonas de especial protección de aves (ZEPA). Los futuros parques naturales, que promueve la Consellería de Medio Ambiente e Desenvolvemento Sostible, guardan relación con sus LICs, aunque su extensión no coincide exactamente con la de ellos.
El parque natural del Macizo Central está ubicado sobre la Serra de Queixa y abarca territorios de ocho municipios: Manzaneda, Trives, Chandrexa de Queixa, Montederramo, Vilar de Barrio, Laza, Castrelo do Val y Vilariño de Conso.
Este lugar está formado por sierras y montañas casi despobladas, con extensos pastizales y terrenos sobre los que predomina una gramínea: la festuca. En estos parajes también pueden encontrarse zonas de fraga autóctona.
Principalmente, son bosques de robles “carballeiras”, que se asientan en las zonas próximas a los regatos. Son tierras del lobo, una especie que creó poblaciones estables.
La fauna es rica e incluye especies que raramente pueden verse en otros parajes. En este grupo entran el gato montés, la alondra común, el águila real, el búho real o la lagartija de la sierra.
El segundo parque natural es el de Pena Trevinca. Abarca los municipios de Carballeda, A Veiga y Viana y ofrece “un estado de conservación bo, en xeral, aínda que sofre frecuentemente a acción dos lumes e os impactos derivados da minaría (extracción de lousa”, según se apunta desde Medio Ambiente.
Trevinca posee uno de los lugares de mayor valor natural de la Comunidad autónoma: “O Teixadal”, incluido entre los bosques de tejos “de maior importancia da península Ibérica”, según Medio Ambiente. Además, hay castaños, robles y “carballeiras” del endémico “Quercus orocantabrica”.
La variada fauna incluye especies endémicas, como son la lagarta rabuda o el “lagarto das silveiras”. Las aves merecen un capítulo especial, con poblaciones únicas como las del acentón alpino, curruca tomillera y abejaruco común. También hay rapaces, como el águila culebrera o el halcón abejero.
Medio Ambiente pretende consensuar los espacios protegidos
La Consellería de Medio Ambiente pretende obtener el visto bueno de los ciudadanos para los dos nuevos parques naturales. Con este objetivo presentará en público sus planes de ordenación de recursos naturales y de desarrollo sostenible.
La declaración de parques naturales pretende ofrecer una fórmula “de desenvolvemento, baseada na natureza e na potencialidade turística”, según explicó el director xeral de Conservación da Natureza, Xosé Benito Reza. Añadió que su creación convertirá en un importante “activo istos territorios mergullados da Galicia interior”.
Asegura que su ejecución “dependerá da armonía e do consenso. Sen acordo é moi difícil crear os parques e nós non queremos impoñer”. A este respecto, el director xeral pretende presentarlos en reuniones “con participación pública”.
Insiste en que las medidas de protección no son nuevas en el Macizo Central y Pena Trevinca, declarados lugares de interés comunitario, dentro de la Red Natura 2000, en el año 2004. La Consellería de Medio Ambiente trabaja sobre la base de estas áreas protegidas, aunque la superficie de los futuros parques naturales será inferior y oscilará entre las 20.000 y las 25.000 hectáreas. En todo caso, tanto el del Macizo Central como el de Pena Trevinca forman parte del programa “Ourense, Montaña Oriental” (Omor), que incluirá también los de O Invernadeiro y Enciña da Lastra.
Como primer paso para crear los nuevos espacios protegidos, la Consellería redactó sus respectivos planes de ordenación de los recursos naturales. Estos trabajos realizan un diagnóstico de los lugares y definen sus grados de protección.
Un año de trámites para su creación
Los dos planes de ordenación de los recursos naturales y los de desarrollo sostenible de los futuros parques naturales están finalizados. Lo anunció el director xeral de Conservación da Natureza, que los calificó de “ferramentas básicas para poñelos en marcha”.
Antes de continuar los trámites de creación de los espacios protegidos, los cuatro planes serán presentados a los vecinos de los 11 concellos afectados, buscando conseguir su visto bueno. Para crear los nuevos parques naturales, después de presentar los citados planes a los vecinos, éstos deberán someterse a exposición pública durante un mes. Este periodo permitirá presentar alegaciones a las personas o entidades que lo estimen conveniente. La respuesta a estas alegaciones, que dará la Consellería de Medio Ambiente, es el último paso que deberán superar los dos proyectos de protección natural antes de su aprobación definitiva, que otorgará el Consello de la Xunta.
Xosé Benito Reza apuntó que todos estos pasos podrían realizarse en un plazo aproximado de un año, siempre que exista un consenso acerca de la creación de los nuevos espacios protegidos.
Fuente: La Region
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