El Juzgado de Guardia decretó ayer prisión provisional para Carlos E.R., de 36 años y vecino de Chandrexa de Queixa, acusado de los delitos de estafa y falsedad documental. El detenido, que se presentó voluntariamente ayer por la mañana en la sede de la Policía Autonómica al saber que le habían ido a buscar la noche anterior a su casa, es un tratante de ganado muy conocido en la comarca de Trives con una condena anterior en Pontevedra por un delito similar.
Se le acusa de vender derechos agrarios a través de un portal en internet que después no inscribía correctamente en el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). A los compradores les enviaba documentación falsa acreditando el registro de los cupos, para después cobrar la cantidad económica pactada.
Tras prestar declaración ante el juez de guardia, Carlos E.R. fue trasladado a la prisión de Pereiro de Aguiar con los cargos de estafa y falsedad. Se decretó también la entrada y registro en el domicilio del detenido, en Chandrexa, que se llevó a cabo a primera hora de la tarde sin que los agentes que lo practicaron pudiesen encontrar el ordenador que presuntamente utilizaba para realizar las transacciones vía internet.
La investigación, desarrollada por la policía autonómica a instancias de la Fiscalía de Ourense, se inició a partir de que la Xunta de Galicia detectase documentos falsos en las cesiones de los derechos y presentase la correspondiente denuncia.
Cinco ventas
Los hechos que se le imputan son cinco ventas de derechos en las que actuó como intermediario entre empresarios de Xinzo de Limia y O Carballiño y clientes ganaderos en Navarra. Las cantidades económicas que percibía por estos traspasos varían desde los 3.000 a los 30.000 euros, según fuentes próximas a la investigación.
La compraventa de derechos agrarios es habitual en el sector de la agroganadería. Estos cupos pueden generar subvenciones y, en el caso de los derechos de pago único, beneficios anuales que se perciben al final del ejercicio. Estos últimos son los que vendía a través de internet el detenido.
Según fuentes próximas a la causa, Carlos E.R. se labraba primero la confianza de los compradores realizando transacciones legales que abrían el camino a una segunda venta fraudulenta aprovechando que el cliente se fiaba. En este caso, los derechos agrarios no cambiaban de titular, a pesar de que el comprador recibía en casa un documento con el sello de la oficina agraria (los cupos son tramitados por la FEGA pero pueden inscribirse en cualquier oficina agraria del Estado español). En otras ocasiones, el detenido realizaba escritos de renuncia falsificando la firma del comprador.
Puede haber más afectados
La causa iniciada ayer incluye cinco ventas fraudulentas en la comunidad foral de Navarra, pero no se descarta que pueda haber más ganaderos afectados por esta estafa que habría dejado en muy mala situación económica a algunos de los compradores. Cabe señalar que algunos de los derechos agrarios llegaron a venderse por treinta mil euros.
Fuente: Faro de Vigo
Se le acusa de vender derechos agrarios a través de un portal en internet que después no inscribía correctamente en el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). A los compradores les enviaba documentación falsa acreditando el registro de los cupos, para después cobrar la cantidad económica pactada.
Tras prestar declaración ante el juez de guardia, Carlos E.R. fue trasladado a la prisión de Pereiro de Aguiar con los cargos de estafa y falsedad. Se decretó también la entrada y registro en el domicilio del detenido, en Chandrexa, que se llevó a cabo a primera hora de la tarde sin que los agentes que lo practicaron pudiesen encontrar el ordenador que presuntamente utilizaba para realizar las transacciones vía internet.
La investigación, desarrollada por la policía autonómica a instancias de la Fiscalía de Ourense, se inició a partir de que la Xunta de Galicia detectase documentos falsos en las cesiones de los derechos y presentase la correspondiente denuncia.
Cinco ventas
Los hechos que se le imputan son cinco ventas de derechos en las que actuó como intermediario entre empresarios de Xinzo de Limia y O Carballiño y clientes ganaderos en Navarra. Las cantidades económicas que percibía por estos traspasos varían desde los 3.000 a los 30.000 euros, según fuentes próximas a la investigación.
La compraventa de derechos agrarios es habitual en el sector de la agroganadería. Estos cupos pueden generar subvenciones y, en el caso de los derechos de pago único, beneficios anuales que se perciben al final del ejercicio. Estos últimos son los que vendía a través de internet el detenido.
Según fuentes próximas a la causa, Carlos E.R. se labraba primero la confianza de los compradores realizando transacciones legales que abrían el camino a una segunda venta fraudulenta aprovechando que el cliente se fiaba. En este caso, los derechos agrarios no cambiaban de titular, a pesar de que el comprador recibía en casa un documento con el sello de la oficina agraria (los cupos son tramitados por la FEGA pero pueden inscribirse en cualquier oficina agraria del Estado español). En otras ocasiones, el detenido realizaba escritos de renuncia falsificando la firma del comprador.
Puede haber más afectados
La causa iniciada ayer incluye cinco ventas fraudulentas en la comunidad foral de Navarra, pero no se descarta que pueda haber más ganaderos afectados por esta estafa que habría dejado en muy mala situación económica a algunos de los compradores. Cabe señalar que algunos de los derechos agrarios llegaron a venderse por treinta mil euros.
Fuente: Faro de Vigo
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