El Ministerio de Fomento adjudicó a la unión temporal de empresas integrada por Exalmer y Obras, Caminos y Asfaltos las obras de conservación de diez tramos de ocho carreteras nacionales de la provincia de Ourense, según publica el Boletín Oficial del Estado (BOE) en su edición de ayer. Las obras habían salido a licitación por 7.871.004 euros y fueron adjudicadas por 6.307.035 euros.
Los trabajos afectan a tramos en la provincia de Ourense de las carreteras N-120 (Logroño-Vigo), N-536 (Ourense-Trives), N-525 (Benavente-Santiago), N-540 (Lugo-Ourense), N-541 (Ourense-Pontevedra), N-542 (la variante de la N-120 al paso por el barrio de O Pino, en la ciudad), C-546 (Ponferrada-A Rúa) y el tramo de enlace entre las carreteras N-120 y N-525 (el Puente de Velle). En total, los recorridos que se acondicionarán suman 233 kilómetros.
Las obras tienen como objetivo mejorar la seguridad vial, tanto acondicionando la plataforma viaria como las instalaciones de servicio. Así, entre las actuaciones que se realizarán se incluyen los servicios de comunicaciones, vigilancia, atención a accidentes, mantenimiento de los elementos de la carretera, servicios de vialidad invernal, mantenimiento de las instalaciones de suministro de energía eléctrica, alumbrado, señalización variable y semáforos. También se incluye la realización de inventarios, reconocimientos, estudios de accidentalidad e informes de seguridad vial.
Conservación
También se van a realizar trabajos de desbroce, fresado y reposición del firme, limpieza de cunetas y otras labores de conservación ordinaria. Asimismo, en el contrato adjudicado ayer se incluye la reparación de viales de servicio de estas carreteras y caminos anexos que sean de titularidad estatal. Estas obras cuentan con financiación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) dentro del periodo de actuación 2007-2013.
Los trabajos afectan a tramos en la provincia de Ourense de las carreteras N-120 (Logroño-Vigo), N-536 (Ourense-Trives), N-525 (Benavente-Santiago), N-540 (Lugo-Ourense), N-541 (Ourense-Pontevedra), N-542 (la variante de la N-120 al paso por el barrio de O Pino, en la ciudad), C-546 (Ponferrada-A Rúa) y el tramo de enlace entre las carreteras N-120 y N-525 (el Puente de Velle). En total, los recorridos que se acondicionarán suman 233 kilómetros.
Las obras tienen como objetivo mejorar la seguridad vial, tanto acondicionando la plataforma viaria como las instalaciones de servicio. Así, entre las actuaciones que se realizarán se incluyen los servicios de comunicaciones, vigilancia, atención a accidentes, mantenimiento de los elementos de la carretera, servicios de vialidad invernal, mantenimiento de las instalaciones de suministro de energía eléctrica, alumbrado, señalización variable y semáforos. También se incluye la realización de inventarios, reconocimientos, estudios de accidentalidad e informes de seguridad vial.
Conservación
También se van a realizar trabajos de desbroce, fresado y reposición del firme, limpieza de cunetas y otras labores de conservación ordinaria. Asimismo, en el contrato adjudicado ayer se incluye la reparación de viales de servicio de estas carreteras y caminos anexos que sean de titularidad estatal. Estas obras cuentan con financiación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) dentro del periodo de actuación 2007-2013.
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